Escenario. El Hombre, con monoculo en el ojo derecho,brebisa un gran mapa mundo, sentado en una silla. Al abrirse el telón, continúa. Luego, se levanta y habla.

El Hombre. (Haciendo una reverencia)…
"Si la sociedad tuviera todo el poder para frenar a un solo hombre, sería tan injusto como si ese hombre tuviera todo el poder para limitar a toda la humanidad" ( Jhon Stuart Mills).
Atrapados entre las cárceles de pensamiento pululan muchas personas en este momento.
Controladores del pensamiento en forma de bots, navegan entre las redes sociales, para imponer sus modelos y estructuras de pensamiento, de acuerdo a la conveniencia del sistema, mientras la plutocracia comercial dirige los destinos del hombre.

Nunca más te hemos estado más cercados por el miedo que en estos tiempos donde el totalitarismo es más una religión que deben profesar quienes vivan en esta sociedad que una corriente política.
Los patrones de pensamiento quieren controlar lo que pensamos, lo que queremos e incluso, imponernos lo que les conviene.
Estamos atrapados entre el miedo y la desinformación, que provocan desmoronamientos de la sociedad, que no sabe cómo enfrentar sus miedos y como superarlos.
1968 fue un parte aguas, donde la sociedad se convulsionó y al llegar los años 2000 en adelante la generación x y la millennials y la post-millennials se encerraron en patrones de pensamiento, dictados por las modas reguladas por los poderosos, que no siempre han buscado el bien de la sociedad sino más bien su dominio, mientras nos dejábamos conducir como ovejas al matadero, y pobre de aquel que se opusiera al control del pensamiento. Este tipo de control de pensamiento, como Festinger lo entendió y lo escribió cuando hablaba de las sectas son modelos aplicados para el control y El dominio y las masas desafortunadamente las masas quieren ser controladas sin siquiera pensar porque es más fácil vivir en la comodidad del dominio mientras tengas pan y circo para entretenerte y en ese sentido las redes sociales en cumplido su tarea porque es más fácil pasarte todo el día en el face que ver tu propia realidad y enfrentarte a tus propios demonios.

El mundo necesita un cambio para que los patrones de pensamiento no sean el pan nuestro de cada día y seamos capaces realmente de pensar diferente y no estar atrapados en estas cárceles para seguir siendo ratitas en la noria que giran y giran las ruedas solamente para estar estacionados en el mismo lugar, enriqueciendo unos cuantos y dejando la libertad de pensamiento y discusión a los poderosos por no atrevernos a ser diferentes.

(El Hombre se detiene. Sonríe. El telón cae terminando la obra).