Poemas : Santiago Montobbio

Pintura : Lluís Ribas

 

 

12 de septiembre de 2024

 

SANT CUGAT. YA VEO EL MONASTERIO, Y A ÉL VOY.

Vuelvo, tras años, a la galería de Lluís Ribas

por inaugurar temporada con su nueva pintura.

He venido tantas veces, tantos años.

Muchas veces solo, y algunas

también contigo. La presentación

de nuestro libro de arte

en el Monasterio con el alcalde.

Mientras hablaba fijaba en ti

la mirada, para abstraerme.

El arte nos congrega.

El arte es alma.

Madre.

 

LA PAZ DEL MONASTERIO. LA PAZ

que da a él llegar. Ser.

 

DENTRO DEL MONASTERIO TAMBIÉN PAZ.

El rosetón maravilloso, las naves,

en una capilla la Virgen de Montserrat.

Paz.

 

EL ROSARIO, YA RECORDABA EL REZO DEL ROSARIO

-lo he pensado al llegar- de las señoras

en el Monasterio. Aquí está.

El rezo, a Dios. El alma,

a Dios.

 

EL REZO, EL REZO. EL ALMA

para el rezo. Rezo el

susurro, el canto.

 

LLEGAN NOTICIAS, POCO ANTES DE SALIR DE CASA,

de Roberto Alifano. Veo en la nota que me manda

que por parte de madre es familia

de Tomasi di Lampedusa, el autor

de El Gatopardo. Sicilia, la Sicilia

de la que escribo al escribir

de Bufalino, la pasión de mi padre

por este libro y por Bearn

y Mort de dama, de Villalonga,

y los paralelismos que de ellos

se han trazado y de los que nos hablaba

de niños, como de tantas cosas.

En una librería en la que siempre entraba

cuando aquí venía y me alegra ver

que aún está veo el libro de prosas

inéditas que han editado de Joan Vinyoli,

y pienso que lo compraré en Barcelona

a los amigos de Documenta. Quería leer

prosa de Espriu, y también poemas.

Releí los poemas de Vinyoli, ya los había releído

a veces, también escrito algo.

De ellos volví a escribir.

Lo publicaron en Francia.

Veremos la voz que hay

en estas prosas. Escribo esto

y las señoras continúan

con su rezo. He de ir

a ver ya a Lluís y su pintura.

 

 

AQUÍ HABLÉ, AQUÍ ESTABAS, MADRE.

Veo que al claustro, al lado,

se puede ir tras decirlo en recepción.

Otro día entraré y pasearé por él

con calma. Ahora el alma de aquel día,

el arte que en esa alma

aún vive. Tiembla y vive.

 

(Sant Cugat del Vallès)

 

LA LUNA CAMINO DEL TREN DE VUELTA A CASA,

la luna sobre San Cugat, los cuadros

de Lluís, que me hacen recordar

el verso inglés –“El niño es el padre

del hombre”-, porque se necesita

una vida de arte para llegar

a esta simplicidad, esta

sobria y como mágica elegancia.

La poesía de la pintura

en la noche es honda.

 

(En el tren de Sant Cugat)

 

CIELO GRIS SOBRE LA PEDRERA.

Los árboles del Paseo de Gracia.

Casa. Pensaba que es la primera vez

que vuelvo de ver la pintura de Lluís,

este pintor amigo que también te quería,

pues sabía lo que eras para mí -y así te

invitaba a todo- y tú no me esperas en ella,

madre. Pero es casa. Es casa

el amor, el alma, una vida

de ellos repleta.

 

(Barcelona)