Cuentan que un alcalde franco facha de la Alcarria se ha propuesto llenar los bolsillos del erario público, rascándose los suyos, e imponiendoun impuesto a días de plazo para cobrarle una multa a la encantadora y bella señora Ascensión Mendieta, la mujer abandonada a su suerte y a la de la jueza argentina María Romilda, gracias a la cual ha logrado sonreír al poder dar sepultura a su padre amado.

- Gracias a ti, Ascensión, no desfallecemos, recordando a todos estos huesos de nuestros hermanos republicanos, que son el bien más preciado de la Tierra, además de ser asesinados con un tiro o dos en la nuca y rematados por un César enano cruel y sanguinario, que saben los curas, aunque no lo dicen, que se pudre en los infiernos.
 "Les matan y a la vez les odian", comentan en el pueblo. Y esto, porque, como dicen,un primer edil sufre la comezón del odio patrio propio de su partido, y no quiere consentir que los huesos de los republicanos asesinados reposen con la dignidad de un ser humano, ordenando se les re inhumen en las loberas y cunetas donde la venganza de Cruzada sacro facha evoca día a día el tiro en la nuca y la tragedia del exilio.
 Cuentan, a más, que este edil, con su calabaza llena y alegre por ser edil de primera, se pasea todas las noches por los términos de la Alcarria, lugares abundantes de huesos de republicanos asesinados, retozando alrededor de las loberas y cunetas describiendo en su mente la venganza del perrero, saltando de un término a otro con aspecto enloquecido comoantes y después del crimen patrio, diciendo :

- Multa a estos huesos por sacarles del olvido ordenado bajo palio.Memoria Histórica, te digo : estos huesos te entrego, 2057 euros me has de pagar ; burlándose de ellos y de nosotros, los que creemos en la Paz, la Reparación y la Libertad, sabiendo que este dinero servirá, como han hecho otros, para patrocinar su partido o comprar nuevos volquetes de putas.
 Todos los que tienen la protección del César enano y de la iglesia hechicera que asegura la sucesión al trono saben que la dictadura fue una tragedia para los republicanos, y una venganza exquisita para los franco fachas apasionados y preocupados de que los hijos nunca recuperen los huesos de sus padres o abuelos, pues ellos, después de cometer estos crímenes, supieron, como saben ahora, que van montados en un carro mágico franco facha tirado por ángeles alados,un presente de su abuelo, el César enano.