El sello argentino Ediciones del Retortuño (1), publicó el volumen de crónicas periodísticas titulado Era esto o poner bombas, del autor local Facundo García.

El siglo XX argentino fue fértil en este tipo de libros, compilaciones de artículos originalmente publicados en medios periodísticos y reunidos posteriormente en un volumen unitario que gozó de mayor o menor fortuna, según la época, los avatares del público lector y la crítica, así como el talento del autor.

En general, se trató de textos signados por el retrato costumbrista de un período dado y un ámbito determinado. El título más célebre del subgénero en Argentina es sin duda Aguafuertes porteñas, del periodista, novelista, cuentista, dramaturgo e inventor Roberto Emilio Godofredo Arlt (1900-1942) y cabe destacar que su trascendencia se debió particularmente a que su autor fue más allá de la fotografía epocal, destacando los matices y las observaciones que remiten directamente a la condición humana desde un plano más universal, hábilmente intercalados en sus crónicas.

A esta estirpe arltiana que trasciende las fronteras del mero artículo de costumbres pertenece con toda justicia lo elaborado por Facundo García en su Era esto o poner bombas, definitivamente literario en su rigor y sus señalaciones, con incesante hincapié en situaciones, conflictos, definiciones y agudas acotaciones que trasladan el conjunto a un plano que va más allá de la simple écfrasis esperada en una crónica.

Sin desmedro de los valores reconocidos que posee la crónica periodística en sí misma cuando está firmada por un escriba de evidentes kilates profesionales –y tal es el caso confirmado de García-, en lo que hace a Era esto o poner bombas la inscripción de este título dentro de “los pesos pesados” del género de la no ficción resulta evidente e insoslayable, habida cuenta de su permanente juego entre los campos complementarios de lo objetivo y lo subjetivo, hábilmente manejado por el escritor mendocino con una pluma que no necesita nunca de ripios y floreos para ir a la médula misma de las circunstancias que atraviesa con la precisión y el cuidado de un escalpelo, separando minuciosamente las apariencias de las intimidades mismas de la situación, exponiendo con meridiana claridad cómo lo micro se enlaza, mantiene en todo momento sus vínculos y refleja lo macro.

Así, el ojo infatigablemente viajero y lúcido de Facundo García, como el del protagonista de El Aleph, nos sumerge en un calidoscopio de visiones que van desde lo que sucede en un local bailable mendocino (dentro y fuera de los asistentes al encuentro), hasta las aventuras vividas de camino a Macchu Picchu por el autor y rescata para nosotros un imperdible reportaje al poeta, traductor y periodista argentino Félix della Paolera (1923-2011), amigo de Jorge Luis Borges (1899-1986), corresponsal de Martin Heidegger (1889-1976) y compañero de copas y confidencias de William Faulkner (1897-1962). Asimismo, en la sección titulada Cuadernos de África, viajamos con García atravesando miles de kilómetros y conocemos hechos y personajes que configuran, como bien refiere, algo que puede ser “apasionante, pero también una pesadilla”. Y hay más, mucho más en este libro abierto a las experiencias y conclusiones alcanzadas a lo largo de una década y media de periodismo comprometido : una entrevista a un fotógrafo ciego, Evgen Bavcar (1946) ; reflexiones acerca de la heroica y breve vida de Julius Fucik (1903-1943), el militante de la resistencia checa a la invasión nazi de 1939 ; el regreso al sitial de una enigmática puerta de piedra supuestamente conducente a otras dimensiones o la intromisión en la biblioteca de 20 mil volúmenes de Iósif Stalin (1878-1953), por solo citar algunos ejemplos de este periplo puntualmente publicado en diversos y reconocidos medios periodísticos de la Argentina. Porque hay más, mucho más que conocer y “vivir” por interpósita persona en las casi 200 páginas de Era esto o poner bombas, resulta también más, mucho más recomendable la lectura atrapante de este muy notable autor argentino.

El autor

Refiere Facundo García, en la solapas del volumen : “Soy periodista y docente. Crecí en el barrio El Ruiseñor, de Godoy Cruz, donde pasé la adolescencia leyendo y dibujando. A los 18 años me fui a Buenos Aires. Por entonces intuí que la escritura podía ser una clave para vivir atento. Durante la década siguiente lo confirmé : fui piquetero, asambleísta y Licenciado en Ciencias de la Educación (Universidad de Buenos Aires). Esas experiencias, junto al ambiente de las pensiones porteñas y las charlas con amigos, son todavía una experiencia ineludible. Probé diversos oficios hasta que me contrataron en un diario. A partir de ese momento trabajé en gráfica (Página/12, Los Andes, NAN), radio (Radio Nacional Argentina) y TV (Canal 7 – Televisión Pública). Fui enviado especial en China, Alemania, Austria y varios países de Sudamérica. Integré la antología Por los caminos del Che (Editorial Sudestada, 2012), y proyectos relacionados con los derechos humanos, además de participar en documentales que se han publicado en la prensa española (El País). Harto de la capital, un día regalé todo, metí en la mochila cuatro calzoncillos y salí de viaje. Llegué a África. El libro Preguntas de los elefantes reúne las crónicas que quedaron luego de andar miles de kilómetros por ese continente. Actualmente curso el Doctorado en Letras en la Universidad Nacional de Cuyo y soy redactor de Policiales del diario MDZ Online.

Notas

(1)Dirección : Mitre 565. Subsuelo. Oficina 5, Mendoza, Provincia de Mendoza, Argentina.

(2)Ediciones del Retortuño, Colección Bitácora, ISBN 978-987-86-4009-9, 196 pp., Mendoza, Provincia de Mendoza, Argentina, 2020.