Escenario. Es de noche. Una lámpara potente ilumina el muelle de un puerto, en el cual, sobre uno de los pilotes, está sentado Elder. Ataviado con jeans y una camisa negra de tela de seda, está fumando y en su rostro, se advierte la nostalgia.

Al abrirse el telón, habla.

Elder. La vida es como este puerto…A veces, parece estar casi a oscuras. Y no parece haber más compañía.

(En ese preciso momento, se enciende una luz del otro lado del escenario y se escucha una voz).

Voz. No estás solo.

(Elder, visiblemente impactado, voltea a todos los lados).

Elder. ¿Quién eres ? No logro verte.

Voz. No te preocupes por eso. Solo quiero que sepas que no estás solo.

Elder. (Tirando su cigarro a un lado y expeliendo el humo). ¡Hace mucho tiempo que nadie está conmigo !

Voz. ¿Por eso fumas ?

Elder. Para aliviar mi soledad.

Voz. El tabaco no alivia tu aflicción. Solo te enferma.

Elder. (Con el rostro entre sus manos, y visiblemente conmocionado). Desde que mis padres fallecieron, nadie se ha ocupado de mí.

Voz. Hay quien piensa en ti en todo momento

Elder. ¿Y por qué no puedo verlo ?

Voz. Pero lo percibes.

Elder. (Tocando con su mano su pecho). Eso sí, he sentido a alguien.

Voz. Ese alguien está más cerca de lo que crees.

Elder. ¿Y como puedo conocerlo ?

Voz. Es fácil.

Elder. Hace mucho tiempo que busco a ese alguien.

Voz. Y Él ha estado esperando que lo busques.

Elder. ¿En verdad ?

Voz. Por eso fui enviado.

Elder. ¿Él te envió ?

Voz. Si.

Elder. ¿Por qué ?

Voz. Quiere que lo conozcas.

Elder. Quiero conocerlo. Ya no quiero sufrir más soledad.

Voz. Tu momento es ahora.

Elder. ¿Quién eres ?

Voz. Un mensajero.

Elder. ¿Un ángel ?

Voz. Así es. He sido enviado para que conozcas al Altísimo.

Elder. ¿Y dónde está él ?

Voz. Aquí junto a ti.

Elder. (Se vuelve a uno y otro lado). ¡No lo veo !

Voz. Las cosas esenciales solo se perciben con el corazón, son invisibles a nuestros ojos.

Elder. Entonces, ¿Qué debo hacer ?

Voz. Cierra tus ojos y siente Su presencia.

(Elder cierra los ojos y sonríe).

Elder. (Emocionado). ¡Sí, Él está aquí ! Gracias Altísimo Señor.

(El telón cae terminando la obra).